EL SILENCIO DE LOS CORDEROS MEXICANOS
A pesar de la protesta de más de un millón de ciudadanos el domingo contra el fraude electoral cometido en México, los grandes medios informativos de ese país guardan silencio sobre lo que se considera la mayor manifestación popular en la historia mexicana.
En Mesa Redonda sobre el descontento generado allí por los comicios presidenciales, los periodistas Lázaro Barredo, Reinaldo Taladrid, Renato Recio, Rogelio Polanco y Randy Alonso aseguraron que los denunciados esperan que las masas se desanimen y se imponga el fraude.
Señalaron que ya durante la campaña electoral los medios mexicanos ejercieron una sugestión compulsiva en la opinión pública denigrando al candidato Andrés Manuel López Obrador, a lo que se sumaron órganos de prensa de España y Estados Unidos.
El mexicano Luis Hernández, periodista de La Jornada, opinó telefónicamente que esos medios han apostado por quienes los benefician.
CON EL IMPERIO DE FONDO
Los comicios del pasado dos de julio en México no se pueden ver solo como un proceso electoral nacional, sino como una consulta en una etapa de dominación imperial.
En la Mesa Redonda se explicó cómo se utilizó el miedo como instrumento para influir en el resultado. Varios medios de prensa locales hablaron de supuestos peligros que acompañarían un triunfo del opositor López Obrador, que si México caería en crisis, que si los lazos con Estados Unidos serían un desastre.
Sin embargo, otras fuentes sostienen que el Instituto Federal Electoral (IFE) facilitó un fraude cibernético con la aplicación de un algoritmo.
Tras la multitudinaria concentración dominical en apoyo a López Obrador, el oficialista Partido de Acción Nacional insiste en presentar los resultados electorales como hechos consumados, que ya existe un presidente electo y no hay marcha atrás. Su postura es acelerar la decisión de reconocer a Calderón.
PREDOMINA LA INCERTIDUMBRE EN MÉXICO
El Instituto Federal Electoral mexicano, árbitro de las elecciones, actuó antes y después de los comicios de forma parcializada para favorecer al candidato oficialista Felipe Calderón.
En la Mesa Redonda se explicó cómo esa entidad usurpa el papel legal del Tribunal Electoral Federal, único capacitado para nominar a un presidente ante la impugnación del candidato del Partido Revolucionario Democrático Andrés Manuel López Obrador, quien reclama el conteo de voto por voto para nominar al ganador.
Los panelistas comentaron la situación embarazosa de varios gobiernos que se adelantaron en felicitar a Calderón cuando aún no se ha anunciado oficialmente al ganador.
Telefónicamente desde Ciudad de México, el senador Jesús Ortega se refirió a la indignación que han despertado entre los mexicanos las irregularidades del proceso electoral. (Reportaron: Martha Dustet, Alberto Ajón y Rogelio del Río).
En Mesa Redonda sobre el descontento generado allí por los comicios presidenciales, los periodistas Lázaro Barredo, Reinaldo Taladrid, Renato Recio, Rogelio Polanco y Randy Alonso aseguraron que los denunciados esperan que las masas se desanimen y se imponga el fraude.
Señalaron que ya durante la campaña electoral los medios mexicanos ejercieron una sugestión compulsiva en la opinión pública denigrando al candidato Andrés Manuel López Obrador, a lo que se sumaron órganos de prensa de España y Estados Unidos.
El mexicano Luis Hernández, periodista de La Jornada, opinó telefónicamente que esos medios han apostado por quienes los benefician.
CON EL IMPERIO DE FONDO
Los comicios del pasado dos de julio en México no se pueden ver solo como un proceso electoral nacional, sino como una consulta en una etapa de dominación imperial.
En la Mesa Redonda se explicó cómo se utilizó el miedo como instrumento para influir en el resultado. Varios medios de prensa locales hablaron de supuestos peligros que acompañarían un triunfo del opositor López Obrador, que si México caería en crisis, que si los lazos con Estados Unidos serían un desastre.
Sin embargo, otras fuentes sostienen que el Instituto Federal Electoral (IFE) facilitó un fraude cibernético con la aplicación de un algoritmo.
Tras la multitudinaria concentración dominical en apoyo a López Obrador, el oficialista Partido de Acción Nacional insiste en presentar los resultados electorales como hechos consumados, que ya existe un presidente electo y no hay marcha atrás. Su postura es acelerar la decisión de reconocer a Calderón.
PREDOMINA LA INCERTIDUMBRE EN MÉXICO
El Instituto Federal Electoral mexicano, árbitro de las elecciones, actuó antes y después de los comicios de forma parcializada para favorecer al candidato oficialista Felipe Calderón.
En la Mesa Redonda se explicó cómo esa entidad usurpa el papel legal del Tribunal Electoral Federal, único capacitado para nominar a un presidente ante la impugnación del candidato del Partido Revolucionario Democrático Andrés Manuel López Obrador, quien reclama el conteo de voto por voto para nominar al ganador.
Los panelistas comentaron la situación embarazosa de varios gobiernos que se adelantaron en felicitar a Calderón cuando aún no se ha anunciado oficialmente al ganador.
Telefónicamente desde Ciudad de México, el senador Jesús Ortega se refirió a la indignación que han despertado entre los mexicanos las irregularidades del proceso electoral. (Reportaron: Martha Dustet, Alberto Ajón y Rogelio del Río).
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